Y no es solamente que pensemos aplicarla para uno mismo solamente, sino que en cualquier caso es una máxima que tenemos que pensarla de manera colectiva. Las Asociaciones de pacientes agrupadas, trabajando en conjunto, sobre la base de nuestras experiencias de vida, hemos ido proyectando en nuestras mentes y en nuestros corazones (dos palabras que me resulta muy difícil separar), el modelo que queremos de un Sistema de Salud basado en el principio básico de: Acceso a una salud de calidad sin restricciones.
Bajo esta premisa la primera conclusión debería ser: Si esta pandemia no nos mata literalmente tendremos que salir con todas nuestras ganas a comunicar, exponer y plantear nuestros puntos de vista. Por supuesto entendemos que los cambios se hacen juntos, pasando por el trabajo de campo que llevamos a cabo las Asociaciones, hasta llegar a una consulta médica de calidad, con acceso a todos los estudios que faciliten un diagnóstico oportuno, y que haya disponibilidad de medicamentos para todas las patologías.
Es por eso que hoy es necesario hacer escuchar nuestras voces en todo el ámbito de la salud. No solamente para dar a conocer nuestras inquietudes, sino también para proponer que los pacientes deben estar sentados en la misma mesa en la cual se debate nuestro destino.
Porque hoy es el coronavirus, ayer fue el VIH, o la gripe influenza o como sea que se llame la próxima pandemia, el que va a pagar con las consecuencias al final del camino son los pacientes. Pero hete aquí que pacientes somos todos, los que estamos abajo y también los que están arriba. Lo que deja claro que las mejoras que estamos necesitando, en atención, en diagnósticos, en especialización, en trabajo científico, van a recaer en todos, absolutamente en todos, o todes para que no quede nadie por fuera.
Me pregunto hoy cuanto más valdría tener un paciente informado, con conocimiento de causa y también de efecto, en momentos en que la información muchas veces hace la diferencia a la hora de evitar y transitar por momentos difíciles en materia sanitaria. Creo que la nueva normalidad también pasa por tener una información transparente, compartida, que baje de las cabezas que manejan el sistema y se desparrame por el conjunto de la sociedad.
No tengo dudas que la información nos hará mejores pacientes, interesados, partícipes. Solidarios en todo sentido, porque si algo mueve a un paciente informado es tener la oportunidad de ayudar a otra persona a la hora de enfrentar un diagnóstico.
La Alianza de Pacientes y el Colegio Médico han entendido y comparten la visión de cómo debe ser el futuro de nuestro sistema de salud, cuales son los pilares fundamentales que deben guiar toda acción. Los pacientes como destinatarios y los médicos como hacedores y transmisores del conocimiento científico, en procura de soluciones hacia un mundo más pleno, más justo, más humano.
Sr. César Barces
APAHE – Asociación de Pacientes y Afectados de Hepatitis